jueves, 9 de enero de 2014

Las piedras de la memoria

Transito una y otra vez el filo. Como un trapecista deslizándose por la barra, antes y después de hacer un ejercicio en el aire, una pirueta. El año pasado leí La pirueta de Eduardo Halfon, uno de los libros que más me gustaron. Me acuerdo del nombre del autor porque pienso en halcón. Los halcones se suspenden también en el cielo.

También leí después de mucho tiempo en el descansadero de los libros, donde pasan los libros su cuarentena del mundo fuera de la casa, para acostumbrarse a estar con nosotras, Escenas de caza (furtiva), de Agustín Gómez Arcos, uno de mis escritores preferidos. Uno de los que más conforman mi andamiaje.

Cuando te conocí te regalé uno de sus libros. De El cordero carnívoro surgían todas las marías-adjetivo, las que escapaban a la nada, al no. Es un libro donde la casa es una protagonista más. Las paredes que rezuman. Envejece. La memoria. Como la casa de Cien años de soledad. Con estancias y ojos grandes.

Transito el filo del cuadrilátero de El mismo amor, la misma lluvia y me acuerdo del cuento de La araña enamorada de la golondrina que, hacendada, pasó toda la noche tejiendo una palabra: golondrina. Si te quedas, todas las noches tejeré una palabra para darte los buenos días. Transito el filo y me imagino tejiendo una red que no me deje caer.

Te regalé un cd de Morente y Lagartija Nick, Omega, el que cantaba a Lorca con algunas músicas de Cohen. Morente por las fuentes del agua, y Lagartija porque en los troncos del huerto del abuelo de Saramago siempre se esconden la arena de la playa y los lagartos. Pequeño vals con la boca cerrada. En una cama donde la Luna ha sudado.

Estoy aturdida. Tomo pastillas para dormirme y café para mantenerme despierta. Quiero escribir alegre. Brincar saltos. Me gustaría pintarme la cara y el cuerpo de azul, como un cielo de Nut lleno de estrellas. Así podría recordar la risa y la magia. Escrita en el cuerpo. Así podría abandonarme tranquila al sueño y a las compuertas que se abren dentro de los troncos de los árboles. Para trasladarme a los mundos de fantasía. Sin necesidad de levantar fortalezas. Soplaré, soplaré, y tu casa volará.

Pienso en el padre del protagonista de Despedidas, que muerto, conservaba en la mano la piedra que un día le regaló su hijo. La piedra de la memoria. Pienso en la cinta de besos cortados que Alfredo construye para Toto en Cinema Paradiso. La cinta de la memoria. Pienso en una caja verde y dorada, pintada a mano, donde caben ambas memorias. La de las piedras y la de los besos.

Pienso en la terraza de Roma en la que un día me dijiste que te casarías conmigo. Porque te gustó cómo regaba las plantas. No había decadencia, ni fiestas de ricos, pero todos los flamencos vinieron a posarse en los charcos y los suelos tenían lozas de dos colores. Para tendernos a la sombra del verano. Como en la película de La gran belleza.

Me asomo a la ventana desde donde se ve la nieve. Imagino una terraza de tejados. Sobre el cristal he colocado la fotografía de mi regalo de reyes. Tres frascos de cristal: uno con arena de playa, otro con aire para respirar, otro con agua de mar. Construyo mi casa. Me desnudo y me pongo, unas encima de las otras, las diez bragas de colores nuevas. Los osos de piedra de la estantería de los libros ya no pueden comerse a la bailarina de latón que improvisa en el otro marco negro.

Me como las palabras de papel. Las mastico a conciencia. Para dormirme. En diez bragas. Espero no olvidarme de pintarme. Azul. Suelto las manos. Viajo por los desiertos. Me trago a mí misma de una vez por todas. Somos nómadas.

Las piedras de la memoria no desaparecen.





2 comentarios:

  1. Por fin estás de vuelta María. Te hemos echado de menos estas Navidades... Estás perdonada por aquello de "las Fiestas", pero no nos abandones tanto tiempo, ¿eh?
    El Cordero Carnívoro lo leí por recomendación de un gran amigo. Me sorprendió y me gustó, mucho. De hecho volví a por "El Niño Pan".
    Hasta pronto... ¡espero!

    ResponderEliminar
  2. Dios, como te he echado de menos!!
    Por qué te has hecho tan necesaria??

    ResponderEliminar