Leer En la orilla no ha sido un buen preámbulo para esta
sala de espera. Los cuerpos hinchados y flotando en el marjal. Como grandes
medusas llenas de tierra.
El marjal es un laberinto en el que el tiempo no es ninguna
dimensión. No pasa. Los hombres perseguidos y matados como alimañas. Los rostros
ahogados. Sin presente.
Marjal. Alimañas. El hombre es una bestia. Los cañones de
los revólveres, las escopetas de caza. Estos muertos incómodos.
Marjal. Matar. Caza.
Sí, leer este libro ahora. Por aquello de lo inexorable. Abiertos. Sin aire.
En el marjal se oyen los trinos de los pájaros y los saltos
de los sapos al entrar en el agua. Algunos sapos deberían escribirse con z.
Porque son enormes cuando se tragan.
En el cartel, ‘silencio, por favor’.
Empezar Zoco chico apoyada en el quicio de un vagón de metro, con un
perro moribundo al que no dejan de dar patadas, no ha sido tampoco una buena
idea. Los hilos en la boca. El charco de sangre con forma de
cabeza.
Otra z.
Otra z.
En la pintura que compartimos ayer antes de despedirnos, un Guernica de inmigrantes se hunde
en una patera mientras, en el horizonte, un barco de vacaciones pasa. El mar es azul pero no me acuerdo de buscar la flor.
Salgo del hospital. Me agarro fuerte al borde. Invento una tierra al fondo. Salto al vacío de la noche.
Salgo del hospital. Me agarro fuerte al borde. Invento una tierra al fondo. Salto al vacío de la noche.
En el marjal hay una tierra con un mar adentro.
‘Tan cerca que si alargas tu mano, creo que puedes alcanzar la mía’. Podríamos tocarnos.
En el marjal el agua es verde. Es la misma red, pero con
menos gritos.
En el marjal hay hoy un muerto solo, vuelto hacia sí mismo, pero
en algún momento, como ahora en el mar, el muerto de este enredado de cañas,
también fue colectivo.
El ruido seco de las cañas.
Escribo ovillada en la silla de plástico del fondo de la sala. Vadeando el vértigo de perdernos. En un cortejo de solos. Con tiempo.
En el cartel, ‘silencio, por favor’.
Me encanta "Zoco Chico" de Chukri y tengo muchas ganas de leer "En la orilla".
ResponderEliminarAlberto Mrteh (El zoco del escriba)